Denunciar las injusticias sociales, luchar contra ellas e ignorarlas aprovechandolo lo mejor que puedas, no son cosas mutuamente excluyentes, o sea, se pueden hacer las tres al mismo tiempo. Ahora, claro, las necesidades son infinitas y los recursos limitados: todo tiene un costo de oportunidad. Hacer un poco de una, le quita a la otra y así. Hacer una hasta cierto punto te puede comprometer de tal forma que hacer las otras dos se hace imposible.
Nadie puede darselas de luchador social teniendo un sueldazo del gobierno, del Centro Leon, o un canal de TV... Claro que hay diferentes mezclas y equilibrios. Pero hay puntos donde no hay vuelta atras.
Tomar una posición política no muy de acuerdo con lo establecido de forma pública también tiene sus costos. Hay que olvidarse de los grandes medios, de las funciones públicas. Porque, primero, la gente con poder no va a decir "ay, si, ok, I'm sorry" sino que se ponen boca arriba como un gato (me encanta esa frase, hehe), te aruñan, tienen mecanisos muy reales y efectivos de cohersión. Y, segundo, a la gente no le gusta que le digan que la estan jodiendo, como que "ey callate, pero estamos bien, jevy, ey!, para que quejarse, ey!", brindaran toda la complicidad necesaria.
Ahí hay un tranque porque no nos podemos condenar a la apatía política eterno. ¿La solución? Las organizaciones, los grupos, eso, son mecanismos de socializar y repartir los costos, no es lo mismo, salir con una escopeta uno solo, no hay sindicatos de una gente, ni mov soc, por ejemplo. Pero definitivamente hay quienes están condenados a asumir los costos más que otro. Esa es mi teoría.
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